Lámina San Vicente Ferrer

San Vicente, un santo que dedicó su vida a predicar el evangelio por los pueblos más recónditos de España, Francia y Suiza.
Nació en Valencia en 1350 y sus padres le enseñaron desde muy pequeño a llevar una vida humilde y a cultivar la caridad, repartiendo limosnas a los mas pobres y ayudando a los desamparados.

San Vicente ingresó a los Padres Dominicos con tan solo 21 años y se convirtió en profesor de filosofía en la Universidad.
Tenía la habilidad de hacer predicciones e hizo algunos milagros sorprendentes ante las multitudes que se juntaban a su alrededor para escucharlo.

Fue un gran orador y en sus sermones daba grandes enseñanzas.
Sus palabras eran escuchadas… a partir de su paso por cada una de las localidades, sus habitantes empezaban a ser mejores personas.

“Adoctrinar la mente y el alma para que juntas puedan vivir en paz”
Hay que ser coherentes con nosotros mismos, predicaba, y que la mente, las emociones y la voluntad sean una herramienta a nuestro favor y no un obstáculo para nuestra vida.
Este es uno de los lindos mensajes que San Vicente Ferrer dejó en su legado.
Fue un hombre muy comprometido políticamente y tuvo una gran influencia en la sociedad en la que vivía.

Siempre proclamó que educar los valores como el compromiso, paz, hermandad, bondad y generosidad en los niños (y no tan niños) ya que es fundamental para construir un mundo mejor.

En nuestro blog puedes leer 7 enseñanzas de San Vicente para enseñar a los niños a convivir en armonía con nuestro entorno y que entre todos podamos construir un futuro mejor.

Festividad: 5 de abril