Lámina Virgen de Fátima

El 13 de mayo de 1917 se apareció ante tres niños pastorcitos, Lucía, Francisco y Jacinta. Ese domingo Francisco y Jacinta fueron a buscar a su prima Lucía para llevar a pastar a las ovejas.
Los niños salieron al amanecer hacia la Cueva da Iría, un lugar cerca de Fátima, en Portugal.
Cuando estaban ahí, Lucía se quedó mirando a una encina y gritó: ¿Quién es esa mujer?
Ante sus ojos apareció una mujer más luminosa que el sol, vestida de blanco con un manto con bordes dorados y un rosario en la mano.
Hola, Lucía. No te asustes. Soy la Virgen
- Te he elegido a ti porque eres la mayor. Quiero que lleves mi mensaje a todas las personas.
¿Qué te ha dicho? - preguntaron Francisco y Jacinta a su prima, pues ellos solo podían verla.
¡Que recemos el rosario todos los días y que regresemos aquí durante los próximos seis meses todos los días 13 a la misma hora.
Volvieron a casa y contaron lo que les había pasado, pero casi nadie creyó su historia.
Sin embargo Los niños consiguieron permiso y volvieron a la gruta. Contaban que la Virgen insistía en el poder de la oración, para salvar al mundo. Cada vez que volvían a ver a la Virgen miles de personas los seguían al lugar. Los niños empezaron a presagiar guerras y calamidades en el mundo.
Tras la aparición del mes de junio los niños contaron que la Virgen había dicho a Francisco y a Jacinta que iban a morir pronto. En cambio Lucía viviría muchos años para dar testimonio de las apariciones.
Pero no lloren, pidieron no tenemos miedo. Ella nos ha dicho que nos acogerá en su manto.
En la última aparición miles de peregrinos pudieron ver el sol comenzó dar vueltas en el cielo.

Poco tiempo después murió Francisco y Jacinta. Cuando Lucía cumplió 14 años ingresó en un convento. Donde tuvo más apariciones de la Virgen y el Niño. Continuó transmitiendo los mensajes al mundo y murió a los 97 años.
En el lugar se construyó la capilla que la Virgen había pedido y que Hoy es el Santuario de la Virgen de Fátima.

Festividad: 13 de mayo