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Lámina Santa Ana

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Ana fue una Santa muy importante porque fue la mamá de la Virgen María.  Ella estaba casada con Joaquín y juntos vivían en Nazaret.  A pesar de que se querían muchísimo y les encantaba estar juntos, tenían ganas de que la familia creciera, durante muchos años trataron de tener hijos, pero no lo lograron.

Un día Joaquín fue al templo a hacer una ofrenda para el Señor, cuando de repente se le acercó un hombre diciéndole que un hombre casado que no tenía hijos era una persona indigna, por lo que lo echaron del templo.  Con mucha pena y lleno de lágrimas en los ojos, caminó por horas en dirección a las montañas, donde se arrodilló y rezó por muchas horas pidiéndole a Dios que les regalara el milagro de poder tener hijos.

Ella  por su parte hacía lo mismo todos los días, nunca se cansaba de pedirle a Dios que los ayudara, y que si lo hacía, ella pondría a su familia a disposición de cumplir la voluntad divina.  Aquella tarde mientras Ana rezaba un Ángel se le apareció, y le dijo: “Vas a dar a luz, y el fruto de tu vientre será bendecido por todo el mundo”. 

Ana no se imaginaba lo que esas palabras significarían en un futuro.  Fue así que 9 meses después, nacería su única hija, llamada María.  Con el pasar de los años, se convirtió en la cuando su hija María tuvo a su propio hijo, Ana se convirtió en la abuela de nada más y nada menos que; ¡De Jesús!

Esta familia fue siempre muy unida y agradecida del regalo que Dios les hizo, cumpliéndoles el deseo que habían esperado con tantas ganas, es por eso que Ana se encargó de que rezaran en familia, y que no pasara un día sin que se diera las gracias por la vida misma, que es un regalo.

 

Festividad: 26 de Julio

Patrona de la Familia